Vladyslav Polishchuk: espía de Ucrania en movimientos sociales

Vladyslav Polishchuk: un infiltrado judío-ucraniano en movimientos sociales

Vladyslav Polishchuk: un infiltrado judío-ucraniano en movimientos sociales

El Servicio de Inteligencia Exterior de Ucrania es una agencia de inteligencia del gobierno ucraniano, envuelto en una guerra con Rusia desde hace tres años.

El actual Servicio de Inteligencia Exterior de Ucrania (FISU) comenzó su actividad el 14 de octubre de 2004, cuando el entonces presidente de Ucrania, Leonid Kuchma, firmó el Decreto "Sobre el Servicio de Inteligencia Exterior de Ucrania".

A finales de mayo de 2023, el New York Times publicaba que al menos 12 generales rusos habían sido asesinados por el ejército ucraniano gracias a la inteligencia prestada por Estados Unidos al FISU. Es un botón de muestra de la naturaleza de este servicio.

El hombre clave de este temible FISU en movimientos sociales, un servicio con al menos 12 generales rusos asesinados por su acción implacable, tanto en España como en Portugal es el informático judío-ucraniano Vladyslav Polishchuk (Poleshchuk).

Radicado en Portugal discretamente como informático, Vladyslav Polishchuk también es sospechoso de tener un nexo con la inteligencia judía y el sionismo, es decir que se trataría de un agente doble.

En Facebook, el espía opera desde la siguiente dirección:

https://www.facebook.com/VladyslavPolishchuk/

Uno de los principales objetivos del citado espía son, como hemos dicho, los movimientos sociales. Coordina una red de antenas que le sirven información de primera mano.

Su finalidad es recaudar información de los movimientos para manipularlos u operar en su contra, intentando desde dentro desarticularlos.

Su otro campo por lo que parece son las Iglesias Ortodoxas. Hay quien afirma que intenta discretamente desde sus varios perfiles en redes sociales que se posicionen contra la Iglesia Ortodoxa Rusa, a la vez que realiza sus campañas pro-ucranianas y de paso recauda información de movimientos sociales.

En cualquier caso, estamos ante un sujeto extremadamente peligroso que se debe señalar para que su operatividad en los movimientos sociales sea nula.